La conducción autónoma es otro de esos santos griales que muchos persiguen por la magnitud del mercado potencial, imaginate lo que significa cambiar en todo el mundo 1500 millones de coches, y cuya aparición inminente se expande y contrae a medida que los fondos de inversión y los fabricantes de coches se dan cuenta que esto va para largo...
Cuando Waymo, la compañía propiedad de Alphabet, presentó en 2015 lo que ellos calificaron como primer vehículo autónomo en una vía pública, la impresión alimentada fue que el Nivel 5 de autonomía sería un hito alcanzable en esta década
Bueno, ya veis que las cosas no han ido así y la conducción autónoma aunque presente en algunos fabricantes y modelos en alguno de los niveles intermedios (del 1 al 3)., es todavía una mezcla poco convulsa de paradigma (ahora en cuestión), mercado nicho y hoja de ruta sin prisas y aparentemente sin pausa
Pero UK, el outsider de la Unión Europea desde 2020, acaba de aprobar definitivamente la Automation Vehicles Act. primera ley nacional que establece que en 2026 habrá coches autónomos en las carreteras británicas
¿Y que ha visto UK ahora precisamente que parece que estamos en un impasse en este siempre emergente mercado de los coches autónomos?
Algo desde luego tiene que ver que Wayve sea británica y que en ella confíen inversores, la confianza aquí siempre significa dinero, como Microsoft, Softbank y Nvidia.
Wayve es en realidad una empresa de IA que le ha dado una nueva perspectiva al desarrollo de la conducción autónoma que hemos visto hasta ahora:
en vez de crear sistemas que se basan en reglas predeterminadas con un cierto margen para la improvisación previsible, Wayve está desarrollando lo que ellos llaman IA incorporada (embodied) que se basa en el Aprendizaje por Refuerzo (reinforce learning), en esencia un sub-sistema de IA que permite aprender mediante prueba y error, pero recompensando las decisiones correctas, lo que me permite que el sistema se autorregule el solo
La estrategia de Wayve es ser lo más agnóstico posible en la utilización de su sistema por parte de distintos fabricantes de coches, pero también de robots, lo que significa disponer de muchos más datos para analizar cómo conducimos no como deberíamos conducir
Aunque el giro que supone Wayve es más que interesante, y aunque un sistema así en efecto fuera posible más allá de unos cuantos servicios de taxis como en US. Me pregunto cómo van a hacer para que la conducción sea deseable para los que compramos coches....
No comments:
Post a Comment