Si algo hay que agradecer al, por el momento, sorprendente presidente Donald Trump es que esta forzando el debate sobre la nueva libertad de expresión e incluso de lo que se considera espacios públicos de debate en este periodo Internet-centrico
Las continuas sospechas de la influencia de potencias extranjeras en las elecciones de la primera democracia del mundo y sobre todo el uso personal de una cuenta en Twitter para expresar, contestar y bloquear a los detractores ha puesto el tema en el top de la agenda politica
Trump no es un chalado ni mucho menos, sino un personaje que ha comprendido mejor que nadie como la opinión publica ya no se moldeaba a través de los medios del siglo XX (periodicos y cadenas de TV), sino de eso que todavia llamamos redes sociales
Con esta estrategia Trump le arrebató la presidencia a la candidata lógica Hillary Clinton que poseia todos los atributos politicamente correctos para ser la 45 presidente de los US, inaugurando una etapa de sucesos que no deberían hacer sucedido
El cabreo monumental del establishment demócrata y sus anillos concéntricos europeos, dirigió su enojo hacia el mensajero, sin querer entender que lo que paso fue que los periódicos todo sobre-representaban una cierta élite que cuantitativamente NO representan al pais
Las ansias reguladores de algunos senadores de los US y de la UE hacia Facebook, Twitter y a Google, olvidan que el problema de que estas plataformas se hayan convertido en foros sociales NO es de las empresas que los gestionan sino de las personas que han desertado en masa de unos medios que NO les representan
Lo sorprendente es que el Trump ciudadano siguió expresando sus opiniones/pasiones a través de una cuenta personal incluso después de convertirse en presidente en una metáfora que nos llevaria a pensar si el presidente Kennedy hubiera editado un periodico propio para hacer llegar sus puntos de vista
Facebook, Twitter en efecto podrían ser regulados para garantizar la libertad de expresión que garantiza la Primera Enmienda de la Constitución de los US, pero con ello los legisladores le harían un flaco favor a los foros públicos legalmente establecidos (senado, congreso, incluso los organismo federales) ya que eso significaria darle una carta de naturaleza publica a plataforma que solo buscan que la gente interactue para vender publicidad!
Ademas si se diera este paso, ¿que pasaria con el siguiente escalón social media de las aplicaciones de mensajeria? (chat app)
Whatsapp, Messenger, Snapchat, Instagram, Line etc hace tiempo que tienen más usuarios activos que Twitter, Facebook y están conformadas como agendas particulares donde las personas gestionan (maravillosamente!) su compleja comunicación cotidiana
¿Los Estados también van a regular la libertad de expresión en estas charlas extendidas en circulos concentricos?...
PS: hemos tardado demasiado tiempo en darnos cuenta que no cambio la comunicación cambio el modelo social!
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