Es difícil imaginar algo tan lejano a la cultura de las generaciones +jóvenes (como la actual genZ) que los consejos financieros y en general todo lo que se etiqueta como información económica. Hasta ahora
¿Y que ha cambiado? pues que hay ya una emergente tribu de influencers que en vez de dar consejos sobre que ropa comprar o como parecer más atractivo para los demás, se dedican a a aconsejar sobre como invertir dinero o como hacer negocios, en general todos bajo esa etiqueta de ganar pasta (money) rápidamente y aparentemente sin (casi) riesgos
Este nuevo fenómeno tiene un genuino carácter made in USA, donde el tiempo que sus usuarios pasan en app de finanzas aumentó un 135% el año pasado, pero también en países como Corea del Sur, Canada, Mexico o Indonesia
Sinceramente, si los jóvenes se mantenían apartados de las app y web de finanzas NO era por que NO les interesase el dinero, sino por que los códigos de comunicación que empleaban NO conectaban con ellos
Eso es exactamente lo que han descubierto estrellitas de la influencia inversora como Austin Hankwitz o Take Sacks dos personajes con fuerte presencia en redes sociales (Tik Tok , Instagram) que han logrado que invertir parezca divertido y sencillo y cool...
A priori y quizá con algo de razón a cualquiera le espanta un poco que una nueva tribu de estrellas del pop inversor tengan miles de followers y dirijan a estos a app´s de inversión como Cash app o la (famosa) Robin Hood o Betterment, sabiendo de sobra que estos finfluencers efectivamente cobran por cada transacción o simplemente por hablar bien de una de estas empresas...
Bueno, en realidad esa es la lógica de TODO influencer y sin embargo el modelo de negocio les sigue funcionando ¿no?
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