Hoy me impulsó a escribir esta noticia ocurrida en una pequeña población del este de Madrid:
"un grupo de chicas todas ellas menores de edad propinaron una severa paliza a otra menor motivadas por la envidia hacia su mayor número de seguidores en Instagram, mandándola al hospital en estado grave"
No creo ni siquiera que sea algo inédito, de manera que las envidias entre adolescentes por su nivel de popularidad en Instagram forman parte de esta vida pos-Internet y pos-smartphone, aunque afortunadamente la mayoría de ellas no acaba como el ejemplo de la chica citada
Antes de hacer casus belli contra las redes sociales, el uso de la tecnologia y demás tópicos que este tipo de noticias suele acarrear, lo que si quiero recalcar es que la relación causa-efecto NO se debe a Instagram (o la red que en ese momento marque la pauta social) sino al vacío de referencias sociales que aparentemente como sociedad propagamos
La popularidad siempre genera y generará envidias, pero los personajes sociales que estan ahi arriba en ese universo de la fama, el éxito y el dinero están más alejados de sus envidiosos. Esta experiencia la conocimos muy bien en el siglo pasado, cuando el cine, la TV o la industria musical convirtió a determinadas personas (lo del merito ya no entro!) en rostros hiper-populares
El problema que ha generado una red cuya arquitectura se basa en la conexión entre iguales (peers) es que ahora por primera vez hay personas digitalmente famosas que viven esa realidad a ras de suelo del resto de los mortales y por tanto están mucho menos protegidas de sus potenciales envidiosos
¿Tiene solución este problema?
no cabe duda que la cultura Instagram (icónica, pre-fabricada e instantanea) se ha colado como referente de una generación que NO ve o no se cree los valores que a priori deberían ser básicos
cambiar esto lleva tiempo y mucho, y desde luego que la culpa no la tiene el sistema educativo, teniendo en cuenta que hoy en dia hay más personas escolarizadas que nunca y durante más tiempo además
El postureo llega a los adolescentes top-down como casi siempre, ya que los nuevos políticos, deportistas y no pocas marcas comerciales utilizan esta táctica para mostrar un contorno a rellenar de contenido por los propios followers
Es un mecanismo complejo que a a veces muestra imagenes entrañables de mascotas y que otras conduce a micro-tragedias cercanas como la noticia citada
No comments:
Post a Comment