El mercado de los proveedores de acceso a Internet (ISP) en los US asciende a más de 133.000 millones de dólares, siendo además uno de los sectores que ha crecido por encima de la media de la economia estadounidense durante los últimos 5 años
Este mercado se lo reparten los cable operadores, a la cabeza de los cuales esta Comcast y Charter, y las operadoras de telecomunicaciones como la AT&T y Verizon, en este 2022 ambos están en una carrera por completar el mapa de la cobertura de la fibra óptica en los US abandonando las líneas convencionales de cobre en un país con un área de 9,8 millones de km2 (por comparación China mide 9,6 millones)
Los US poseen una (muy) buena infraestructura de acceso a Internet y son el noveno país con mayores velocidades de conexión (143 megas de bajada y 43 de subida), pero con un brecha importante:
las mejores coberturas (y más baratas) se dan en las áreas metropolitanas y el resto , donde vive casi la mitad de la población, ni siquiera llegan a la velocidad mínima que la FCC considera debe tener un servicio para ser considerado como banda ancha (25 megas de subida y 3 de bajada)
Con estas características de mercado, la AT&T anuncia ahora que va a ofrecer en los hogares conexiones de 2 y 5 Gigabytes/sg en 70 áreas metropolitanas con unos precios que van de los 110 a los 180 dólares (impuestos no incluidos)
Aunque en los US, para sorpresa de muchos visitantes europeos, es normal que los ISP tengan data caps o limites de descarga de datos, lo cierto es que la AT&T solo los mantiene para conexiones por debajo de los 100 megas, aunque mantiene los 99 dólares de coste de instalación
Teniendo en cuenta que ya con 1 Giga (1000 megas) se puede recibir streaming 4K en 40 televisores simultáneamente, esta oferta de los 2 a los 5 gigas simetricos puede ser un simple sintoma de la guerra comercial con los cable operadores o la puerta de entrada de ese mundo virtual prometido y perseguido por muchos que llamamos Metaverso
En Europa, la preocupación siempre bascula entre la competencia por mayores y más baratas velocidades y la cobertura universal (que llegue a todo el mundo más o menos igual) lo que lleva a imponer unas condiciones más severas y costosas que en los US a las operadoras
Esta divergencia que se ve en el mercado de la banda ancha no es más que el reflejo de la histórica apuesta de los US por primar los sectores de mayor creación de riqueza, algo que en efecto genera divisorias pero que les ha permitido ser lideres, al menos en los sectores importantes, durante los últimos 100 años ...
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