Quizá con la perspectiva del tiempo lleguemos al consenso extendido de que Internet fue innovador en el alcance y sin duda en la forma en que este se produce (personal media le llame en un un libro mio) pero NO en los temas ni en las tendencias que genera
Hace un tiempo note en mi radar biológico que la exhibición sin pudor de la riqueza (flaunting wealth) de una persona se estaba convirtiendo en algo más que un guiño visual de (algunos) futbolistas, cantantes, actores y un corto etcétera
Hasta no hace demasiado tiempo la posesión de riqueza y sobre todo de los bienes que la representan era algo sino a evitar si al menos a mostrar como pidiendo excusas por que le vaya tan bien al personaje en cuestión (hay toda un tradición cultural europea,del norte añado, de la riqueza austera)
En la actualidad ese tabú no se si ha roto del todo pero si que ha sido traspasado con éxito y quizá el ejemplo más directo lo podemos ver en algunas de las series de Netflix (la tele del siglo XXI) que agrupadas bajo el hashtag "Estilo de Vida" muestran la suntuosa vida de algunos personaje populares
No creo que valga de mucho emitir un juicio moral de si esto es bueno o es malo, ya que mi análisis al menos en este blog es siempre empresarial: hay que reconocer que el alarde de riqueza es un nicho de mercado con demanda y lo es además conviviendo aparentemente bien con el discurso de la progresía parlamentaria
¿Que ha pasado para que se haya producido este cambio de valores?
en primer lugar los valores sociales son cambiantes, pese a quien pese, y lo que ayer se considera cool ahora no lo es y viceversa. Dicho esto, también hay que añadir que estos valores no cambian a la velocidad de la moda, sino que lo hacen con una gestación más lenta
segundo, en efecto hay personas que habiendo alcanzado un éxito sectorial, ahora buscan el reconocimiento social más amplio, al menos de aquellos que les siguen (mi público en lenguaje siglo XX)
tercero, con la deriva de los sistemas clásicos de enseñanza y probablemente el descrédito de muchas instituciones antaño prestigiosas , muchas personas no esperan a que estos se reencuentran y ven estas exhibiciones de riqueza como un modelo a imitar o al menos aspirar a ser como (las revistas de moda de lujo emplean ése mecanismo hace mucho)
Asumiendo esto, ahora toca esperar para comprobar si esto es simplemente un cambio coyuntural (y paradójico) como reacción a todas estas crisis simultáneas o realmente es un cambio social cuyo impacto llegará a todas las capas
por ejemplo, ¿cómo enfocamos ahora los programas de RSC?
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